15 febrero, 2013

Es la hora de reconocer y corregir errores.

Tan debil como las hojas de los olmos, cuando el otoño hace que su verdoso color torne a un amarillento marron con tendencia a ser dueña del suelo durante esos tres meses. El otoño es la estación del año que resulta tener apariencia de fortaleza, y sin embargo, desnuda a cada uno de los arboles que roza. Colores cálidos que marcan el inicio del aire fresco y lluvia debil. Así se muestra la pasion mas nociva para el humano: el orgullo. Nos envuelve en una fachada férrea con inseguridades invisibles y permite que nos autoafirmemos de cara a los demás. No obstante, los diamantes se rompen a base de otros diamantes, por lo que las fachadas creadas por medio del orgullo, solo este creador es quien las destruye. Saca a la luz las debilidades y miedos que has querido esconder mediante ese vicio fatal. 

'Yo' por encima de cada uno de los criados que pongo a mi disposición en mi vida personal. Mi opinion viene dada por Dios. Mejor dicho, Dios ha puesto todos sus atributos en mi: todopoderoso, bueno y sabio. Preciosa vanidad quien te hace creer todos esos disparates. No hay mayor imperfección que creerse perfecto. Y amiga mia, es la pedanteria, el orgullo, la vanidad, soberbia o altivez -llámalo como quieras- quien te hace ser esa clase de persona. Creer que no hay corrección posible para tus palabras o error admisible en tus actos. Y como si esto pareciese poco, la mania persecutoria es un malévolo ingrediente más. Constantemente creyendo que todo lo que se hace va en contra tuya, queriendo que tus organos se alimenten de dolor. Vamos, que tienes al propio diablo como familia o amistades. Cuando realmente lo que quieren es que tu tortura emocional diaria sea lo mas pequeña posible, ayudando y aconsejando en lo posible. Sencillamente, cuando hay amor, no hay diablo existente en los corazones. 

Es hora de dejar atras tanto pecado, y encaminarte de nuevo en el objetivo principal, la felicidad. Y estas pasiones te estancan en un tornado sin posible salida. Como decia un ensayista mexicano, Amado Nervo: "Si eres orgulloso conviene que ames la soledad; los orgullosos siempre se quedan solos." De tu lado se iran los que confian en ti, los que te quieren. ¿Y que mayor pecado hay que el que provoca que el amor se vaya de tu vida?

En definitiva, siento haber hecho de una relación conmigo, una lucha constante. 

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